Estas dos ultimas semanas han pasado muy rápido. Quizá demasiado.
Todo empezó, por así decirlo, con un manuscrito que le llegó a mi jefe el lunes 28 para que lo revisara, de la revista Current Biology (él es revisor de este journal). Sólo le mandaron el abstract, que es un pequeño resumen antes del cuerpo principal del artículo. El título, el abstract y los resultados eran exactamente iguales a lo que el papá de martinlúter y otro postdoc llevaban un tiempo investigando y pensaban mandar a alguna revista más pronto que tarde. Mi jefe llamó al editor, y le dijo que no podía revisar el manuscrito porque él pensaba enviar lo mismo la próxima semana, así que el editor le dijo que vale, que lo mandara antes del viernes y que pasarían los dos artículos a revisión directamente (la historia, he de decir, es muy buena y creo que a la revista le conviene publicarla). Así que en menos de una semana, el papá de martinlúter y Mathias tuvieron que hacer un artículo prácticamente desde cero. Fue una semana intensa, pero finalmente el viernes mandaron el manuscrito a la revista. Como descanso, me fuí con el papá de martinlúter a Praga el fin de semana. Fuimos el sábado y volvimos el domingo (está a dos horas en tren, así que es un viaje cómodo). La verdad es que fue un gran viaje. Nos lo pasamos muy bien, Praga me encantó aunque estuviera lleno de españoles ruidosos, y además nos hizo un tiempo estupendo. El lunes, de vuelta al lab y a raíz de un tema que ya habiamos hablado con anterioridad, discutí con él. El martes y el miércoles apenas hablamos y cuando finalmente lo hicimos el miércoles, decidí que hasta aquí habíamos llegado, y rompimos. Así tal cual.
El jueves a mediodía yo me iba a Londres con mi familia, asi que alla que fui. De camino al aeropuerto me encontré con la jefa de pedidos del instituto que iba a ver a su marido a un pueblecito cerca de Stansted. La señora tiene como 65 anyos y se pasó toooooodo el camino hasta Stansted charlando (y yo escuchando y asintiendo). Me vino bien porque asi no pensaba mucho, pero al llegar a Stansted lo único que quería era hablar en espanyol con mi familia sobre lo que habia pasado. Pero en el tren de Stansted al centro de Londres mi padre me dio la mala noticia, y es que un tío mío, hermano de mi madre, había muerto hacía un par de días. No sería taaaaaan terrible si no fuera porque es el segundo que nos deja en menos de seis meses. Mi madre estaba destrozada. Así que todos mis problemas quedaron absolutamente eclipsados. En Londres lo pasamos muy bien. Al menos estábamos todos juntos y eso hizo que todo pareciera algo menos terrible. Por fin el domingo pude encontrar el momento de hablar con mi padre y luego con mi madre. Les conté la situación y me escucharon y aconsejaron. El domingo por la noche, pensando en la vuelta al lab el lunes, todo me daba algo de miedo. No por verle a él, sino por la situacion extraña y tensa que seguro que habría. Y así ha sido exactamente: extraño y tenso. Ahora él lo único que quiere es irse de Dresden. Ya ha discutido con el jefe sobre eso, se han cabreado los dos y prácticamente parece que el asunto ha terminado en que a finales de Marzo, cuando él defienda su tesis, se va.
Y fíjate que yo estoy bien. Que estoy a gusto con la decisión que he tomado. Pero ahora todo es como muy distinto. Hasta ahora Dresden era mucho 'él', y ahora resulta extraño hacerlo todo sola. Pero no estoy mal.
Sólo rara.
Todo empezó, por así decirlo, con un manuscrito que le llegó a mi jefe el lunes 28 para que lo revisara, de la revista Current Biology (él es revisor de este journal). Sólo le mandaron el abstract, que es un pequeño resumen antes del cuerpo principal del artículo. El título, el abstract y los resultados eran exactamente iguales a lo que el papá de martinlúter y otro postdoc llevaban un tiempo investigando y pensaban mandar a alguna revista más pronto que tarde. Mi jefe llamó al editor, y le dijo que no podía revisar el manuscrito porque él pensaba enviar lo mismo la próxima semana, así que el editor le dijo que vale, que lo mandara antes del viernes y que pasarían los dos artículos a revisión directamente (la historia, he de decir, es muy buena y creo que a la revista le conviene publicarla). Así que en menos de una semana, el papá de martinlúter y Mathias tuvieron que hacer un artículo prácticamente desde cero. Fue una semana intensa, pero finalmente el viernes mandaron el manuscrito a la revista. Como descanso, me fuí con el papá de martinlúter a Praga el fin de semana. Fuimos el sábado y volvimos el domingo (está a dos horas en tren, así que es un viaje cómodo). La verdad es que fue un gran viaje. Nos lo pasamos muy bien, Praga me encantó aunque estuviera lleno de españoles ruidosos, y además nos hizo un tiempo estupendo. El lunes, de vuelta al lab y a raíz de un tema que ya habiamos hablado con anterioridad, discutí con él. El martes y el miércoles apenas hablamos y cuando finalmente lo hicimos el miércoles, decidí que hasta aquí habíamos llegado, y rompimos. Así tal cual.
El jueves a mediodía yo me iba a Londres con mi familia, asi que alla que fui. De camino al aeropuerto me encontré con la jefa de pedidos del instituto que iba a ver a su marido a un pueblecito cerca de Stansted. La señora tiene como 65 anyos y se pasó toooooodo el camino hasta Stansted charlando (y yo escuchando y asintiendo). Me vino bien porque asi no pensaba mucho, pero al llegar a Stansted lo único que quería era hablar en espanyol con mi familia sobre lo que habia pasado. Pero en el tren de Stansted al centro de Londres mi padre me dio la mala noticia, y es que un tío mío, hermano de mi madre, había muerto hacía un par de días. No sería taaaaaan terrible si no fuera porque es el segundo que nos deja en menos de seis meses. Mi madre estaba destrozada. Así que todos mis problemas quedaron absolutamente eclipsados. En Londres lo pasamos muy bien. Al menos estábamos todos juntos y eso hizo que todo pareciera algo menos terrible. Por fin el domingo pude encontrar el momento de hablar con mi padre y luego con mi madre. Les conté la situación y me escucharon y aconsejaron. El domingo por la noche, pensando en la vuelta al lab el lunes, todo me daba algo de miedo. No por verle a él, sino por la situacion extraña y tensa que seguro que habría. Y así ha sido exactamente: extraño y tenso. Ahora él lo único que quiere es irse de Dresden. Ya ha discutido con el jefe sobre eso, se han cabreado los dos y prácticamente parece que el asunto ha terminado en que a finales de Marzo, cuando él defienda su tesis, se va.
Y fíjate que yo estoy bien. Que estoy a gusto con la decisión que he tomado. Pero ahora todo es como muy distinto. Hasta ahora Dresden era mucho 'él', y ahora resulta extraño hacerlo todo sola. Pero no estoy mal.
Sólo rara.
6 comentarios:
Si bien tu situación no es sencilla; tampoco es aconsejarte y animarte a través de una firma de blog.
Como sé que vendrás para marzo, espero verte, aunque sea para una cerveza de media hora.
Y si te apetece, me cuentas.
(olvidé una palabra en la firma anterior)
Si bien tu situación no es sencilla; tampoco es fácil aconsejarte y animarte a través de una firma de blog.
Como sé que vendrás para marzo, espero verte, aunque sea para una cerveza de media hora.
Y si te apetece, me cuentas.
Ahora para delante, Elenita. Las cosas cambian, y es complicado mantener la normalidad como si nada pasase, pero se puede. Sé fuerte, e intenta estar serena, de aquí a marzo hay mucho tiempo, y es posible que la ituación se haya calmado lo suficiente como para que él no tenga necesidad de irse.
Ahora sólo puedes dejar pasar los días...
como Reve ya te ha hecho de mamá, y además ya tienes otra, no sé qué te voy a decr yo...
Bueno que la vida es esto, ir tropezando por aquí y aprendiendo por allá.
Está bien que veas que Dresden era mucho él. Ahora tiene que ser mucho tú. Que buena falta te hace.
Ah! Me olvidaba lo más importante: ánimate.
Supongo que ya estarás mejor. De mística no tengo casi nada, pero Santa Teresa decía: " Nada te turbe, nada te espante, todo se pasa", y buena razón tenía la mujer. Un abrazo desde Leiden. :)
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