jueves, 9 de diciembre de 2010

Saliendo del pozo

No todo es malo.

He llegado aquí para hacer un trabajo que no me apetecía, pero lo estoy haciendo muy bien. Mis dos discípulas, a las que he enseñado a hacer disoluciones, a preparar LB, PBS, SOB, HEPES, y placas de agar están muy tristes porque me voy en menos de tres semanas. Que qué van a hacer sin mí, dicen. Mi jefe #2, que me dijo algunas cosas muy injustas por teléfono y sin conocerme, ya se está echando las manos a la cabeza pensando en que me voy. Que quién va a ocuparse de todo lo que me estoy ocupando yo, dice. La gente de los laboratorios, tanto el mío como el resto, me piden cosas, se las hago y funcionan. Que qué buen trabajo estoy haciendo, dicen.

Y aunque no me vaya a servir para nada en el futuro, aunque sea un trabajo aburrido, monótono y cero estimulante, y aunque odie este lugar, es muy satisfactorio saber que una es capaz de hacer casi cualquier trabajo bien hecho.

Mi maltrecha autoestima lo agradece.

4 comentarios:

foncu dijo...

VIVA!!!!

Anónimo dijo...

Muy pocas personas son capaces de hacer casi cualquier trabajo bien hecho, ya me gustaría a mi...

Ánimo

mj

Emilienko dijo...

(pero eso lo sabemos ya todos los que te conocemos)

(lo que nos extraña es que lo dudes tú, Elena)

surenia dijo...

tramposa!! jiji
yo estoy segura de que te va a servir (no me preguntes para qué, todas somos un poco brujas, pero tanto tanto no, ni es necesario, dejemos que nos sorprendan positivamente)