viernes, 28 de enero de 2011

Jet-lag vital

Ahora ya me lo creo. He tardado una semana por lo menos, pero ahora ya me creo que soy doctora, al 100%. He terminado, tengo una publicación, he escrito una tesis, la he defendido, abrí mi primera botella de cava.

Llevo un par de días desmantelando mi hogar. Las paredes aparecen blancas, las cajas se amontonan y hago listas y más listas para tenerlo todo controlado. Ayer Alba volvía del retreat con su laboratorio y me dijo que fuera a cenar a su casa. Llegué esperando una cena de las nuestras, con una botella de vino hasta las mil y hablando de todo, apurando la semana que me queda aquí en Dresden. Y al llegar, me encontré a casi toda la gente que me importa de esta ciudad sentada alrededor de la mesa. Y sí, fue una cena hasta las mil. Y fue grandiosa.

He tardado una semana en darme cuenta de que soy doctora, por fin. Me queda una semana justa en Dresden y no soy consciente para nada de que me estoy yendo. Tengo jet-lag vital.

domingo, 16 de enero de 2011

sábado, 15 de enero de 2011

Hochwasser


Esto es lo que le sucede a un río normal (como el Elba) cuando se derrite la nieve, llueve mucho y el río en cuestión no está represado aguas arriba:

Yo uso este carril bici, que pasa por debajo del arco de la izquierda, para ir a jugar al frisbee. También es una calle normal, es decir, para los coches.


En condiciones normales, las pasarelas de esos barcos están inclinadas hacia el barco, y no hacia la orilla. Las gradas del cine de verano... y uno de los impresionantes atardeceres de esta ciudad...

Nota: todas las fotos pertenecen a http://www.flickr.com/photos/einsiedler/

viernes, 14 de enero de 2011

A 3 días escasos de ser doctora

Llevo toda la semana super tranquila. Ni gota de nervios. El hecho de saber al 150% que NADA puede hacer que no me den el doctorado ayuda, la verdad. Yo creo que ni escupiéndole a la cara al tribunal me suspenderían.

Así que la dificultad, el problema, el asunto, como queráis llamarlo, se reduce a no hacer demasiado el ridículo en el proceso de doctorarte. Aquí tenemos el llamado Rigorosum, en el que dos examinadores tienen cada uno 25 minutos para preguntarte lo que quieran sobre un tema previamente acordado que no tiene nada que ver con tu tesis. Yo he elegido estudio comparativo de regeneración desde hidras hasta vertebrados, con Elly Tanaka, y desarrollo neural, con énfasis en señalización y patterning, con Michael Brand. El Rigorosum, por suerte, es a puerta cerrada. Justo después del Rigorosum, viene la Disputation, que es la defensa de la tesis en sí. Tienes 30 minutos para contar al público lo que has hecho durante cuatro años. Es un poco injusto porque es muy poco tiempo para tantas cosas, pero al final todo el mundo se alegra de que no sea más largo, por aquello de no extender la agonía más allá de lo estrictamente necesario.
Volviendo al tema del ridículo, la Disputation no me da miedo. Es mi trabajo, es mi charla, es mi momento, soy la que más sabe del asunto y lo voy a hacer bien. El Rigorosum es lo que me da un poco más de aprensión. Que te pregunten algo básico del tema de regenaración y no lo sepas, después de trabajar cuatro años en el laboratorio de al lado (literalmente) es algo embarazoso. Y que además pretendas que luego esa señora te dé una nota decente, aún peor.
Así que después de toda la semana llevando el tema con mucha calma, hoy me ha dado el ultra ataque de nervios, y no sé muy bien por qué. Al fin y al cabo, lo peor que puede pasarme es hacer el ridículo durante 50 minutos. Y yo las he pasado peores.

Así que... allá vamos.

martes, 11 de enero de 2011

El día D (de Defensa) se acerca

Hoy, la PhD Office de mi programa de doctorado ha mandado "el e-mail". Ya no hay vuelta atrás:

Dear all,

Elena, Heisenberg Group, will defend her thesis

"The Role of Cell Division Orientation during Zebrafish Early Development"

on
Monday, 17 January 2011, at 16:30,

MPI-CBG, small auditorium.

Everybody is very welcome!

Y mi nivel de histerismo sigue creciendo... yo lo único que quiero es abrir el champán de después...

lunes, 10 de enero de 2011

La vuelta a casa

Llegué sin retrasos a Dresden a las 23.05 de ayer. Me fui a casa y al entrar, descubrí que había olvidado lo bonita que es. Deshice la maleta, preparé la mochila para venir hoy a la biblioteca, me metí en mi cama y he dormido estupendamente. Esta mañana me he duchado en mi ducha, he bebido mi café en mi taza preferida y he caminado hasta el tranvía, disfrutando de ese camino que tan bien conozco y que tanto he echado de menos estos meses. Al cruzar el Elbe, he vuelto a pensar en lo bonito que es el skyline de Dresden, y en que el río iba bastante crecido debido a las últimas lluvias.

He llegado al instituto y aquí estoy, en uno de los cubículos de la biblioteca, preparando la defensa de mi tesis y el examen previo. La gente me ha mirado con cara de: "pero vosotros no estabais en Viena??" He visto a Alba, que me ha dado mi regalo de Reyes. Luego subiré al laboratorio, que ya no es nuestro laboratorio. Habrá alguien extraño sentado en mi sitio, trabajando en mi bench.

He bajado al fishroom, he visto los peces. Me he alegrado de no tener que hacer más experimentos. Aún no he ido a ver "mi" microscopio, mi "amado" 2-photon. No he vuelto a entrar en esa habitación desde ese domingo de Agosto en que hice mi último experimento. Creo que seguiré sin entrar.

En resumen, que he vuelto a casa y estoy muy contenta. Y también estoy poniéndome gradualmente histérica... seguiremos informando.

viernes, 7 de enero de 2011

Feliz año nuevo

Este Enero no soy muy consciente de que hemos cambiado de año. Quizá sea porque es la primera vez que no me he tomado las uvas en mi casa con mis padres. Desde que llegué del bosque, he pasado por todos los estados de ánimo posibles. Desde llorar cada mañana en el desayuno con mis padres hasta el día 5 por ejemplo, que bailamos el waka waka al ritmo de una banda de cornetas y tambores sevillana. Ayer por la mañana salí con mis padres a tomarme un café a la Plaza de Santa Marta. Salió el sol y decidimos sentarnos fuera. Estuvimos hablando de mi futuro y de lo que quería y no quería hacer. Fue la primera vez que conseguí mantener esa conversación sin llorar. También fue la primera vez en que sentí que yo comprendía a mis padres y ellos a mí en este asunto. Dicho así suena fatal, pero yo me entiendo.

Ahora, mientras estudio para el Rigorosum pienso en que el domingo volveré a dormir en mi cama en Dresden, vuelvo a mi otra casa :)