Ayer fue uno de los días típicos de cuando vuelvo a Sevilla por vacaciones. Fui a comprar las cosas que necesitaba, visité a la más chica del barrio en la tienda, almorcé con mis padres en casa y luego vi a gente. Primero quedé con mi amigo Emilienko, a quien las últimas veces no había visto, y nos pusimos al día. Nos dimos una vuelta por el barrio, nos tomamos un aquarius y un colacao, hablamos de Lost y de los Macs y vimos a la infanta Leonor.
Luego quedé para cenar con la más chica del barrio. Fuimos a uno de nuestros sitios favoritos y pedimos exactamente la misma comida que la última vez que fuimos juntas, que creo que fue también la última vez que fuimos, punto. Luego nos fuimos al Central a tomarnos una capirinha de ron miel.
Fue un día muy simple, pero me di cuenta de que días como ayer son casi lo único que echo de menos de Sevilla.
Luego quedé para cenar con la más chica del barrio. Fuimos a uno de nuestros sitios favoritos y pedimos exactamente la misma comida que la última vez que fuimos juntas, que creo que fue también la última vez que fuimos, punto. Luego nos fuimos al Central a tomarnos una capirinha de ron miel.
Fue un día muy simple, pero me di cuenta de que días como ayer son casi lo único que echo de menos de Sevilla.
2 comentarios:
Yo, estando también en la propia Sevilla, también echo de menos días como el de ayer.
Ayer aunque el tiempo estaba malo , las calles estaban animadisimas.
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